.column-right-outer .widget, .column-left-outer .widget { border-bottom:4px solid #000; padding-bottom:20px; }

2012-04-23

NO ME DEJES ASÍ

   REFLEXIONES:            

   AL comenzar el libro, me llama la atención el personaje de Primo, una persona excéntrica, desocupada que juega con la vida, la suya y quizás la de los demás.
En las vacaciones de Semana S. Me fui a Zaragoza, y me lleve el libro, en el autobús abrí el libro y comencé a leer; Primo, Juan Luis y Teresa el eterno trio, unidos por las vivencias de años en la facultad, los años vividos en la juventud, donde se traban las amistades fuertes y profundas, con ellos Adriana la juventud (el espejo en que se miran) Teresa viéndose en Adriana, Primo viendo a Teresa en Adriana, dos planos de la misma persona; Despreocupados y algo irresponsables la manera en que actúan los protagonistas, se lanzan a un reto, a una carrera suicida después de beber unos cuantos “ rulos” .
Comienza la carrera, me atrapa, encuentro que el libro tiene poesía en la manera como describe el paisaje, miro por la ventana hemos pasado ya Tudela, y a lo lejos todas esas formaciones de piedra, me imagino que voy con ellos  subiendo, los Riglos las curvas cerradas los pequeños ríos junto a las malloas, esta cayendo la tarde cada vez leo con mas angustia, toda la descripción es muy bella pero veo acercarse la tragedia, y ocurre. Me doy cuenta que las luces se están encendiendo miro estoy llegando a Zaragoza ,cierro el libro.
La verdad, la soledad, la muerte, decidir: La verdad, el momento de Primo darse cuenta por su profesión de lo que ocurre, “No Me Dejes Así ” la soledad, en el tener que decidir (la muerte) Es mejor no juzgar su decisión, no se si es de valientes, en todo caso no es de cobardes.
En toda la lectura tengo en el pensamiento con una persona muy allegada que en un accidente quedo con una gran minusvalia Ha pasado por todos los infiernos, no voy a reproducir mis conversaciones con ella, sus reflexiones no me pertenecen, es una luchadora, sigue adelante.
A los días retomo el libro, todo el dolor la agonía de una madre que ha perdido a su hija, sigo todo su  duelo el dolor de dos madres, una presente y otra en la sombra, y otra vez me pasa, conozco los paisajes  que describe, los caminos donde Teresa habla con su hija, los paseos desde Igeldo a Mendizorrotz las   bajadas peligrosas en los días de resaca, donde se cogen los percebes. Los caminos que llevan a Orio a  las veredas cubiertas de argoma que te llenan de arañazos, casi puedo adivinar el pequeño montículo  donde quedo Adriana, mirando al mar donde se ve Getaria, el raton, la ria de Orio y Talaimendi. Meli.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Iritzia